Movimiento Romántico y Geología como Ciencia
José Manuel Álvarez-Campana Gallo
Este es el relato de una exploración romántica de la filosofía de la ciencia. El objetivo de esta exploración es –del mismo modo que Park buscaba seguir el río Níger o Livingstone las míticas fuentes del Nilo- recorrer ese tramo que se sitúa en Alemania e Inglaterra, datado entre finales del siglo XVIII y principios del XIX, en donde el movimiento romántico se encuentra con la ciencia ilustrada para conformar una ciencia genuina. Una ciencia renovada a través de una compleja revolución conceptual, como es el claro ejemplo de la geología.
Este fenómeno de conformación revolucionaria, en el sentido kuhniano, de la nueva geología, se produce en una matriz cultural romántica filosófica, científica y artística. Una matriz intelectual y cultural que en el ámbito de las disciplinas geológicas, se manifiesta a través de la producción científica del eje Hutton-Lyell.
Desde ese tramo alto de nuestro cauce pretendo venir aguas abajo hacia la desembocadura para intentar comprobar si esa mezcla entre sucesivos episodios de afloramiento de la emotividad romántica y la racionalidad ilustrada puede explicar el pasado (histórico y filosófico) de algunas disciplinas científicas. Pero especialmente para ver en qué medida la fructífera experiencia de mezcla en el crisol de aquél movimiento romántico que enlaza –entre otras- la filosofía, la ciencia y la poesía, puede desvelarnos claves de interés para la creatividad en la ciencia como acción humana y social, contribuyendo a esa tarea colectiva de tender un puente entre las orillas de la racionalidad y la emocionalidad.